28 de noviembre de 2008

Gritos...


Necesito gritar desesperadamente, gritar hasta quedarmse in voz, hasta desgarrarme la garganta de parte a parte...

Nnecesito llorar hasta secarme por completo...

Necesito por un instante dejar de respirar y sentirme libre...

Gritos ensordecidos surgen de mi voz entrecortada y tenue, ¿dónde estás?

Escapo de mi vida, refugiándome lejos de esta realidad incierta...

Voy de mal en peor, fingir siempre se me dio muy bien, nadie nota nada, nadie sabe nada...

Mi mirada pide a gritos que me socorran, que no puedo con mi vida...

Grito en el silencio de la noche, cuando todos duermen, como un lobo que aulla a la luna llena...

Lloro con fuerza, con rabia, con dolor...hasta que no soporto un segundo más y me rindo...me arrodillo de nuevo...

Grito hasta sentir que la sangre brota de mis labios, grito hasta morir de dolor...

Grito hasta quedarme dormida envuelta en llanto...

Grito...

26 de noviembre de 2008

Días grises...


"Ayer, pasado, mañana digo quizás para no decir ni si, ni no, ni fuego, ni bandera ni te mato, ni me muero, ni siquiera.
Tal vez el siglo que viene te cantaré la canción que nunca terminé ni llueve, ni ternura, ni te debo, ni me debes ni me curas.
Lejos de ti las pesadillas se parecen a los sueños, los que perdí. Ayer, pasado, mañana."

Cuando no es un buen día para escribir, es que no es un buen día... y es que las cosas no pueden ir peor de lo que van, y si pueden, prefiero no tener que afrontarlas, sería demasiado complicado...

Me encantaría poder escribir cientos y cientos de escritos alegres, esperanzadores... esos que tanto me pedís y que tanto os mereceis todos los que día a día os pasais por aquí... pero no puedo, lo siento en el alma, pero no puedo mentiros y escribir finales e historias felices que no siento, cuando escriba algo alegre, quiero que sea porque esa alegría y esa esperanza que plasme en cada una de las líneas que escriba, sea tan cierta como la tristeza que hoy siento...

No puedo más que daros las gracias, porque me aportais muchísima fuerza, y porque sin vosotros ahora mismo mi vida sí que no tendría ningún sentido... De verdad, gracias... espero muy pronto poder premiaros con un escrito tan hermoso como lo sois todos los que entrais aquí...

Yazco en silencio, a oscuras pienso en cada momento de estos días, cada instante, cada segundo... Trato de encontrar la calma, la lucidez, salir a flote de una vez por todas y gritar alto y claro que soy yo de nuevo, que nunca me fui, que seguía aquí escondida en mis pensamientos que vagan en silencio por mi mente y me atormentan... quisiera reencontrarme conmigo misma, aprender de nuevo a vivir como lo hacía antes...

Sola escucho el ruido de la calle, la gente ríe, grita, vive...

Mientras yo me sumerjo poco a poco en mis profundos sentimientos y me olvido por un momento de que existo, así, por un instante, me siento feliz...


24 de noviembre de 2008

El universo se apaga...


"Hay siempre un sentimiento muerto en un corazón roto..."


"¿Qué escribes?

- Una carta a los reyes magos

- ¿Y qué les pides?

- Que nos devuelvan la vida"


Siento bombear mi corazón lentamente, al ritmo que dan mis pasos alejándose de aquello que me hace sentir mal...

Escucho el tic tac de mi reloj, el tiempo pasa...y pesa...

A veces, sólo a veces, me siento como flotando en el aire...como si mi cuerpo fuese una molécula de polvo más...y me relajo, me dejo llevar por esa sensación...

Camino sobre los rastrojos de mi propia vida, de mi propia muerte...

Soy joven, ya lo sé, pero no consigo encontrar ese sentido que la vida podría tener, no observo nada bueno en mi por lo que merezca la pena continuar caminando sin mirar atrás, pase lo que pase...

Mi cuerpo pide a gritos amor, comprensión, alegría...

Aflojo el ritmo, voy sintiendo como mi corazón late cada vez más fuerte, la intensidad de su latido me asusta y a la vez me hace sentir viva, algo que hacía algún tiempo que no sentía...

Me encuentro, como siempre, cerca de las vías... adoro este lugar, se respira paz, tranquilidad... traigo conmigo mi cuaderno amarillo y un bolígrafo, nunca se sabe cuando puede venir a inspiración a visitarme...

Escucho atenta el volar de los pájaros a mi alrededor...lleno de aire mis pulmones y siento la brisa acariciar suavemente mi rostro...el cielo está negro, un negro precioso y a la vez tenebroso... esa oscuridad del cielo me inquieta...

Observo atónita el paso veloz del tren de cercanías a mi lado, me quedo quieta como una estatua de sal y me transporto con su rugido al interior de uno de sus vagones...

Mi reloj marca las ocho y media de la tarde, ya es de noche, regreso a casa con calma...

El tiempo es arena en mis manos... cae suavemente al vacío sin parar ni un instante...
Mi vida es como un pequeño desierto...

Poco a poco voy cerrando los ojos y así, va apagándose el universo...

23 de noviembre de 2008

Seguiré, aunque duela...


Las fuerzas se agotan, la vida me pesa, me supera, me mata…

Las ganas de escribir, de salir, de vivir…cesan poco a poco… no puedo con mi vida, no puedo…
Rompiéndome en pedazos aparto las huellas que quedan de aquello que un día fui… esas luces y sombras que oscurecen mis días y atormentan mi existencia…

En ocasiones observo mi alrededor y me desprecio a mi misma por sentirme como me siento… hay gente que me necesita, y aunque este no sea el mejor momento de mi vida, no me importa relegarme a un segundo plano por ayudarlas, ellas se lo merecen más que yo, y al fin y al cabo, yo estoy aquí por ellos…

Ahora sólo me queda la soledad, esa soledad que me impuso el recuerdo…

Soledad que me quema, soledad que me acompaña, soledad que me hace vivir y a la vez morir…soledad…

Mi alma descansa sobre unas fúnebres losas… mi pensamiento vaga solitario por los submundos de la muerte, de la oscuridad…

No consigo superar esta situación, es superior a mis fuerzas… quiero gritar, necesito gritar, pero el mundo no quiere escucharme…

Ahora todo está revuelto, he perdido las riendas de lo que un día fue mi vida, y no consigo volver a encauzarla por el camino correcto…

Y aunque exista luz al final de este oscuro túnel, no consigo verla todavía…

Lamento profundamente no poder agradar a esas personas que detrás de una pantalla buscan leer letras alegres, llenas de vida y esperanza… en mi mente y en mi corazón ahora sólo hay oscuridad, tristeza, muerte…

Con estos pensamientos me estoy destruyendo a mi misma, quizá sea lo que busco, autodestruirme… porque no puedo más, porque estoy cansada…

Pero a fin de cuentas, la vida es así, y sigue, y no puedo desaparecer, aunque sea lo que más deseo en el mundo, porque hay gente que me necesita, y por ellos, aunque me duela, seguiré…

21 de noviembre de 2008

Antes de rendirnos, fuimos eternos...


"¿Cuánto tiempo ha pasado desde los primeros errores?, ¿del interrogante en tu mirada?. La ciudad gritaba y maldecía nuestros nombres, jóvenes promesas, no, no teníamos nada...Dejando en los portales los ecos de tus susurros, buscando cualquier rincón sin luz.
"Agárrate de mi mano, que tengo miedo del futuro", y detrás de cada huida estabas tú... "

El cielo anuncia tormenta, la mañana es gris y oscura, como mis pensamientos…

En mi interior albergo esperanzas muertas que me comen día a día, atormentando mi existencia…

Mis venas se obstruyen, mi corazón se para por un instante… trago saliva y vuelvo a respirar, vuelvo a la realidad…

Un día más la rutina se apodera de todos los minutos de mi vida, me levanto temprano, miro mi reflejo ante el espejo, ese reflejo que aún no consigo reconocer… siento el agua fría recorrer mi rostro adormecido, una vez más la rutina me supera…

Me dirijo hacia aquel lugar que me atormenta, que me mata día a día… tengo en mi mente el pensamiento de que un día más que voy, es un día menos que tengo que volver…

Regreso a mi casa, subo a la azotea, miro como el mundo sigue ahí, bajo mis pies, pero no lo siento conmigo, el mundo dejó de tener sentido hace tiempo, quisiera volver a sentir esa sensación que antes me producía recorrer las calles de este pueblo, corretear por los senderos embarrados, saltar los charcos y sentir como el agua humedece el bajo de mis pantalones… me gustaría volver a todo aquello, sonreír de verdad, no por obligación…

Miro mi guitarra postrada en esa cama, cubierta de una espesa capa de polvo, su música un día me hizo soñar… rozo suavemente sus cuerdas, suena una melodía triste, repleta de tristeza y melancolía…

Mi mirada se clava en una foto envejecida por los años, una foto de esa niña rubia, con el pelo rizado y llena de heridas por todo el cuerpo gracias a esas ganas de vivir que albergaba en mi interior…en esa foto tenía una sonrisa contagiosa, una sonrisa que me hizo sonreír por un instante… a mi lado veo la presencia de ese amigo de la infancia que jamás olvidaré, ese niño travieso que se convirtió en mi mejor amigo, mi compañero de juegos… recuerdo cada momento que compartimos de pequeños, en su casa, en la mía, correteando las calles del pueblo sin miedo a nada… ahora de eso sólo queda un recuerdo grato de un amigo que marcó mi vida, sólo queda una mirada tímida acompañada de una sonrisa por todo lo vivido…

Su recuerdo fluye en mí sacando esa parte de mi misma que no conocía, él hacía que quisiera ser mejor cada día, me ayudaba a crecer, a vivir sin miedo al mañana, a disfrutar cada segundo de vida… ahora de esa niña traviesa que cantaba encima de la mesa con su amigo, ya no queda nada…

Ahora voy envejeciendo poco a poco, voy muriendo día a día…

Ahora ya no lloro por temor a naufragar, ahora soy sólo un recuerdo que olvidar…

19 de noviembre de 2008

Tiempo...


Tiempo… dame tiempo… necesito respirar, tomar aliento, subir por un instante a la superficie y sentir como mis pulmones se llenan lentamente de ese aire fresco y puro que aquí se respira…

Las horas, los minutos, los segundos… voy sintiendo el recorrido de la sangre por mis venas, voy notando lentamente una brisa suave que eriza mi piel y me hace temblar…

Cierro los ojos y me dejo llevar, muy lentamente empiezo a pasear por mis pensamientos, aquellos que tenía escondidos en un rincón del corazón, olvidados…

Me relajo hasta sentir mi cuerpo levitando en el aire, adoro esta sensación, adoro este lugar…

Esta playa me transmite una paz interior que hacia mucho tiempo que no albergaba en mi interior, desde la azotea de una vieja casa de madera, escucho el susurro del mar y siento que mis párpados pesan más por momentos, entonces me tumbo a la orilla de la chimenea, para soñar de nuevo…

Despierto algo aturdida, me levanto y al mirar por la ventana encuentro aquella playa de nuevo…


Hace algo de frío, me recubro con una manta y me siento en la arena a observar el amanecer desde esta playa…

Estoy completamente sola, aislada de toda vida… y aunque ahora me siento bien, me gustaría que estuvieses aquí, a mi lado, disfrutando tanto como yo de esta hermosa vista…

Siento una gran tristeza en mi interior, pero trato de vencerla poco a poco, esto no puede seguir así, esta situación no lleva a ningún sitio…

Por momentos tuve la tentación de huir, de escapar de nuevo, como estoy escapando ahora, en este lugar, aunque solo sea una huida fantástica, un reflejo de lo que me gustaría que sucediese…

Me siento en el límite, vivo entre fantasía y realidad, y a veces me resulta complicado distinguir una de otra…

Tumbada en la arena juego a adivinar qué estarás haciendo ahora, si estarás riendo, llorando, pensativo, dormido… entonces te imagino sentado a mi lado, mirando conmigo este paisaje de ensueño, riendo conmigo mientras damos forma a las nubes, si cierro los ojos fuerte, puedo escuchar tu risa a mi lado viendo en el cielo la nube con forma de león, que para mi tenía forma de corazón… y aún puedo sentir como me decías que no, que eso no era un corazón, y me dibujabas uno en la espalda para respaldar tu teoría…

Nunca me había parado a pensar la importancia de tomar una decisión u otra…quizá si aquella tarde en la azotea hubiese decidido hacer lo que tenía en mente, ahora todo sería más sencillo, todo habría terminado… pero, ¿quiero realmente que todo termine? No, creo que no quiero que termine, creo que aquel día pensé en suicidarme porque tenía miedo a morir…

Y es que el miedo es un temible enemigo, al igual que el tiempo, que es el más temible, ya que puedes vencerle en muchas batallas, pero él será implacable en la última…

Tiempo…tic tac, tic tac… Se acaba el tiempo… Te alejaste demasiado, ya no puedo dibujar tu silueta a mi lado, no puedo saber qué me dice tu mirada, tu sonrisa… Te vas, te has ido…


Mientras, tic tac, tic tac, los minutos pasan, las horas pasan, los meses y los años pasan… pero cuando nos vemos, aún nos buscamos con los ojos, por si todavía queda algo…

Estarás siempre, en mis sueños...


Por mi mente se pasean multitud de letras pidiéndome a gritos que les de forma... pienso, reflexiono, me entristezco por momentos... y al final, acabo recordándote...

Fue una mañana de Mayo, corría el año 2000, yo entonces tenía 9 años, me faltaban unos meses para cumplir los 10… Mi hermana y yo fuimos al colegio, como todos los días… y volvíamos para ir a comer a casa de mi abuela, todo era normal, rutinario… pero ese día fue diferente, muy diferente…

Ya habíamos terminado de comer, y nos disponíamos a irnos de nuevo al colegio, entonces llegabas tú, de tu amado campo, aquel en el que te pasabas las horas… volvías con tus andares cansinos tan propios de ti, y con semblante cansado… “Hay que ver como vienes abuelo…” dijo mi hermana, “Si hija, como vengo…” contestaste, yo iba detrás, te observé por un momento, y finalmente sonreí y, mientras te besaba, te decía “Adiós abuelo”… entonces nos fuimos para el colegio…

Recuerdo que por el camino iba hablando con mis compañeras de clase, y entonces vimos pasar una ambulancia, “Algo ha pasado, seguro que alguien ha muerto” dije yo, mientras mis compañeras asentían con la cabeza…

Continué con mi día, ese día aparentemente normal, estaba en clase de baloncesto, cuando vi a mi hermana venir a recogerme, a mitad de clase… “Verónica, hoy no das baloncesto, el abuelo se ha puesto malo” dijo con semblante serio…

Mi hermana y yo entonces fuimos a casa de mi abuela Victoria, a merendar pan tostado con nocilla y un vaso de leche, mientras veíamos “El chavo del ocho”, eso era lo que hacíamos todos los días… pero aquella tarde mi abuela no nos dejó poner la televisión, entre sollozos nos decía que el abuelo estaba malo, hasta que a mi hermana se le ocurrió preguntar “Pero, ¿se ha muerto?”, entonces mi abuela rompió a llorar y asintió con la cabeza…

Recuerdo perfectamente los días que siguieron a ese, yo era una niña, no entendía muy bien la situación, y la verdad es que desde aquel día nada ha vuelto a ser lo que era…

Ahora me vienen a la cabeza multitud de momentos que pasé con mi abuelo…cuando le quitaba la cartera, cuando le cambiaba el canal de la tele para ver los dibujos, cuando saltaba sobre su barriga y le estiraba del bigote…cuando no quise subir a la furgoneta porque había arañas y me daban miedo, cuando me abrazaba, cuando me besabas y me pinchabas con la barba…

Multitud de vivencias, multitud de recuerdos…

Hace ya 8 años de aquello, pero, abuelo, sigues y seguirás siempre aquí, conmigo, y aún me pinchas con la barba cada vez que me besas, en mis sueños…

18 de noviembre de 2008

¿Soñar?


Los sueños... ¿quién no ha soñado alguna vez? Yo soñaba con ser una princesa y encontrar mi reino algún día...

Ahora ya no sueño, no me gusta, prefiero no soñar, total, no se van a cumplir mis sueños...

Hace poco escuché que tener un sueño no te hace más listo, pero saber que no se va a cumplir sí... Ahora más que nunca estoy segura de esa frase, de lo que significa, y estoy totalmente de acuerdo con la persona que una vez la pronunció...

Era una soñadora despierta, y también dormida... soñaba con todo tipo de cosas que no podía tener en la realidad... con mi príncipe, con ser una princesa, con tener un reino inmenso, soñaba con el amor, con la amistad verdadera, con la felicidad... algo que nunca tendré...

Y no la tendré porque no creo en el amor, tampoco en la felicidad, ¿amistad verdadera? sí, quizá en ella si crea... pero tiene gracia, de todas las personas que conozco en persona, no hay ninguna que me haya demostrado amistad verdadera, quizá sólo una...

Ayer lancé una pregunta, una pregunta extraña, que no siempre se hace a alguien… pero aún así yo la lancé al aire para ver qué respondían… tiene gracia, porque una vez hice esa pregunta a una persona que conozco, una amiga, y su respuesta fue “no, no saltaría por ti, si decides tirarte, tírate, a mi no me líes…” En ningún momento pondría a nadie en un precipicio para que saltara o no por mí, no soy una loca desquiciada ni nada similar, simplemente era una pregunta, y todos los que ayer contestasteis dijisteis lo que yo hubiese respondido si me la hubieran formulado a mi, “no saltaría por ti, te daría la mano para que no saltaras, o para saltar contigo” Gracias a todos por esa respuesta, la necesitaba…

17 de noviembre de 2008

¿Saltarías por mí?


Ahora ha llegado la hora de poner en una balanza lo que has sido, lo que eres, lo que nunca serás…

Muchas veces no me entiendo, hay veces que me odio, me desprecio por actuar como actúo, por hacer daño cuando realmente quiero gritar a la cara de alguien que le quiero, que le necesito, que necesito su ayuda, su hombro para llorar…

Es la primera vez en mi vida que estoy mal y trato de pedir ayuda, de refugiarme en las palabras de alguien que ni siquiera tiene rostro para mí… y cuando trato de pedirle ayuda termino haciéndole daño, haciéndome daño… y es que, como habrás podido comprobar, nunca se me dio demasiado bien eso de pedir ayuda…

Escribo esto mientras escucho el susurro del viento, ese que es roto por el rugido de un tren que se acerca desde la lejanía…se va aproximando a mí… ¿salto?... tal vez eso nos ayude a todos…

Tarde, el tren ya ha partido y con él mi valentía, o tal vez mi cobardía, no sabría muy bien cómo definirlo…

No os veo, pero siento vuestra presencia a mi lado… aquí, a mi alrededor hay mucha gente, gente a la que grito desesperadamente “ayúdame”, pero ellos no quieren oírme, no quieren escucharme…

No comprendo muy bien porque sólo me inspiro cuando estoy mal, por eso todos mis escritos siempre son tristes, tétricos, oscuros…

Tal vez el tiempo debería detenerse… ¿detener el tiempo? No, mejor que pase rápido, cuánto más rápido mejor, que todo termine pronto…

Divago por mi mente, por mi corazón poblado de gente por la que daría todo cuanto poseo… y me pregunto qué harían ellos por mí…

Sé que muchos os preguntaréis porque no quiero mi vida…nunca la quise, porque nunca fue mía…

Esa gente a la que quiero, ¿lo daría todo por ayudarme? Yo lo daría por ellos si me lo pidiesen, incluso si no me lo pidieran, porque mi vida no es mía, es suya…

Hay veces que pongo a prueba a la gente a la que quiero, tal vez para convencerme de que ellos también me quieren a mí, para saber qué harían ellos por mí… ¿es una actitud egoísta? Puede que sí, pero necesito saber, comprender…Yo lo daría todo, incluso sin pedir nada a cambio…

Estoy al borde de un precipicio…TÚ, ¿saltarías por mí?

Nadie hablará de mi cuando esté muerta...


Mi corazón está helado, parado, muerto...como muerto está mi cuerpo, como muerta está mi alma...

Trato de estar bien, de tenderme una mano, de darme una tregua a mi misma y volver a ser lo que era, pero, ¿qué era antes de ser eso que soy? No era nada...

Si ya nada tiene sentido, si no me importa nada, ahora es cuando más te necesito, cuando necesito tus palabras, tu ayuda…pero tú no estas, te alejas, lentamente, vas huyendo de mi…

¿Por qué? ¿Qué te he hecho? Me gustaría al menos entender algo de esta situación… pero van pasando los días y no entiendo nada, cada vez entiendo menos… será que esto no era tanto como parecía, será que todos los que pasan por mi vida terminan marchándose por la puerta de atrás sin decirme nada a menos que lo diga yo primero…

¿Por qué la gente se marcha de mi lado?… porque no soy esa persona que todos creen que soy, porque cuando pasan dos días y les doy lo que querían se alejan…
Si todo va a seguir igual, prefiero seguir escondida bajo las sábanas, y que nadie me moleste…

Porque me estoy muriendo lenta y dolorosamente… y porque nadie hablará de mi cuando esté muerta…

16 de noviembre de 2008

Asustando al miedo...


Llorando a solas sintiéndo que se atascan mis venas...


Las lágrimas borran los colores, las figuras, las formas, la imagen que imagino...


Con el paso de los días estoy poco a poco hundiéndome más en este terreno de aguas pantanosas que es mi mente...


Las ideas se agolpan, la tristeza aumenta, la soledad me persigue, la indiferencia de la gente me inquieta...


Trato de buscar el equilibrio, el nirvana, ese estado en el que todo me de igual y nada me haga daño...


Despierto envuelta en llanto por la situación en la que me encuentro... ¿importaría acaso que yo no estuviera? me pregunto una y otra vez tratando de encontrar una respuesta que no me conduzca al abismo...


Escucho a lo lejos una voz que me dice que no, que no importaría en absoluto que yo me marchase, que dejase de estar aquí... de pronto aparece otra voz, y me dice que si, que importo, que huir es demasiado fácil...


Me quedo, muriendo por dentro...llorando en silencio...callando los gritos afónicos de mi alma... temblando, sabiendo que no habrá nadie que cure esta herida abierta que aumenta por momentos...


Siempre le dije a mi madre que moriría joven, y que si no lo hacía, terminaría suicidándome, porque desde pequeña tuve miedo de la vida, tuve miedo a todo lo que ahora estoy sintiendo...tuve miedo a tener que elegir tuve miedo al futuro, al abismo, a la soledad, a no sentir... y ahora me encuentro en ese punto exactamente, en ese que siempre temí, en el que mi madre me dio una colleja por decirle esas palabras...era lo que pensaba, y sinceramente lo sigo pensando...no creo que sea capaz de afrontar las dificultades que me ponga la vida... nunca supe afrontar los problemas, siempre he sido una cobarde, siempre he sido demasiado débil para superar los obstáculos que se interponían en mi camino...


Desde que era una niña tuve que enfrentarme a que me dejasen de lado, a llorar en los baños del colegio, y más tarde en los del instituto...


He estado toda mi vida tratando de ganar la batalla conmigo misma, pero siempre pierdo yo...
Soy adicta al jaque mate, ese que yo misma me doy cada día, a cada paso...


Claro que las personas de mi alrededor no han hecho mucho por ayudarme a ganar... quizá por eso me encuentre en el punto en el que estoy... porque yo no puedo salir de aqui sola, y no hay nadie que me tienda una mano y me rescate de mi misma...


Porque hoy por hoy, esto carece de sentido, porque una parte de mi me ataca día a día y la otra parte ya se está cansando de perder...porque la autodestrucción de mi vida no sería algo malo, sino un alivio...


Cuando mi madre leyó esto pensó que era una carta de suicidio...no, no lo es, esto no es más que lo que siento...quizá sean ansias de muerte, pero no podría suicidarme...soy demasiado cobarde para hacerlo...


Así que tranquilos, no os preocupéis por mí, ni lloréis por mí… hace mucho tiempo que estoy muerta…

15 de noviembre de 2008

Tardes frías...


"Cartas en el cajón y ninguna es de amor...nunca un príncipe azul por tu vida pasó; ves las horas marchar frente al televisor y el teléfono está dormido en algún rincón..."


Van pasando los días, las horas, los minutos... trato de encontrar la salida de este absurdo laberinto que quizás yo misma he creado...


Hoy mantuve una conversación con una amiga, decía que como hacía mucho tiempo que no salía estaba diferente, que había cambiado...


No siempre voy a salir por ahí de fiesta, no me gusta ese ambiente, no me gusta la gente, no me gustan los sitios a los que vamos, en general no me gusta nada, sólo la compañía, y no siempre me es grata... El caso es que no creo que por no salir sea una persona diferente... aunque ya no hablemos tanto, aunque no nos veamos tanto, si tú eres mi amiga de verdad, sabrás que puedes llamarme siempre que lo necesites, que me puedes contar las cosas como siempre, pero aquí, las amigas se valoran depende del tiempo que salgan...y cuando dejan de salir y dejan de verse, desaparece la amistad... no se si mi concepto de la amistad es el equivocado, pero creo que aunque no veas todos los días a una persona, o no hables todos los días con ella no significa que ya no sea tu amiga...al menos para mi seguirá siéndolo hasta que me demuestre lo contrario...


En fin, tal vez sea una persona muy rara como dicen ellas...yo sólo sé que prefiero un día entero escapar de ese murmullo que me atormenta y encerrarme en mi cuarto a escribir cuánto siento... Mientras, el tiempo pasa, y pesa...

14 de noviembre de 2008

Quise y no pude ser hada...


"A veces el dolor se vuelve una parte tan grande de tu vida, que esperas que siempre este ahí, porque no eres capaz de recordar un momento en tu vida en el que no haya estado..."


Tras varios días de ausencia de estos mundos del blog, hoy me he decidido a volver a escribir...lo necesitaba, tenía que explicar lo que siento de nuevo, con la normalidad con la que siempre lo he hecho...


Me daba miedo escribir, no sabía lo que podría salir de mis dedos, de mi mente, de mi corazón... Y me fui porque necesitaba un respiro, me estaba ahogando...


He vuelto a salir a la calle, a disfrutar de la compañía de gente que he tenido un poco olvidada...quizá porque necesitaba aclarar mis ideas, entender el porqué de mis actos, tratar de corregir mis errores...


Pero el dolor persiste, la tristeza me sigue allá donde voy y ahora ni siquiera puedo ocultarla como hacía antes, ahora aflora a cada paso que doy y poco a poco me destruye y consigue derrumbarme...


Sé que muchos no comprenden el porqué de mi estado de ánimo, tal vez ni siquiera yo lo comprenda, sólo sé que estoy así, que no puedo dejar de estar así...


Siempre he sido una persona taciturna, solitaria, triste... no me gusta salir con gente, si salgo prefiero salir sola, tener mi espacio para pensar...siempre he sido una persona independiente...


Ahora necesito un abrazo con urgencia, una palabra que me haga temblar, un motivo por el que seguir... él es mi motivo, siempre lo fue, siempre lo será... pero no quiere formar parte de mi vida, y cuando se fue me la arrebató...


Me escondo entre finales felices de cuentos de hadas y princesas, esas que yo nunca seré...


10 de noviembre de 2008

Y no para de llover...


El absurdo desasosiego que se siente al no saber qué me dicen tus ojos...

La melancolia que siento al recordar tu sonrisa tímida haciendo brotar la mia...

No sabría que decirte si ahora mismo te viese frente a mi...supongo que rompería a llorar por todo lo que no te he dicho...

Bueno, creo que toqué fondo...

"No podría ser peor... y es que no encuentro un remedio que rescinda este dolor, este alma con ardor, este mal regusto a tedio. No más me queda decir que te quise cuanto supe, que nunca te quise herir, que ya me harté de vivir esta vida que me escupe..."

Volveré a escribir quizá cuando vuelva a sentir... tal vez nunca vuelva a escribir... se terminaron los finales felices...

9 de noviembre de 2008

Por mi mañana y hoy por ti mi amor…


"Al fin el tiempo nos reunió como a planetas que orbitan. Coleccionabas soles, me dijiste, te enseñé mis heridas...El tiempo y sus mareas fueron meciéndonos con sus latidos..."

Desde aquí todo se ve diferente… ella se encuentra en la azotea, en su azotea, donde se siente libre, donde no hay nadie que la haga llorar…y de repente, aparece él para llenar su vida, para hacerle sentir todo aquello que nunca ha sentido por nadie, y ella se enamora, se enamora cada segundo que pasa de esa tierna sonrisa, de esos ojos que destellan felicidad, que iluminan más que el sol…

¿Por qué todo está tan bien cuando está con él? No lo sabe, pero él la mantiene viva, sin saberlo siquiera…la conquista con miradas…y es que él es diferente, tiene duende, tiene ese ALGO que le hace un ser maravilloso, increíble…sólo conocerlo es un placer al alcance de muy pocos, pero a ella le dejó hacerlo, le dejó formar parte de su vida… es el mejor regalo que podía hacerle…

Cuando todo esta oscuro, triste, taciturno…llega él y con una sonrisa vuelve su negro blanco, y sus días grises se iluminan con su sonrisa…

Ahora escucha canciones de amor, y todas le recuerdan a él…le ha hecho borrar esa tristeza, sólo con su amistad, para ella eso ya es mucho…en ese lugar, tener un amigo es algo al alcance de muy pocos, porque la hipocresía, la traición y la falsedad conviven día a día con las gentes de ese pequeño pueblecito…

La llevó a una playa, y allí se enamoró… y si se enamora él, como dice la canción, se enamora ella…

Allí vivieron los mejores momentos de su vida, de la vida de ambos, porque aunque él no hable nunca de sus sentimientos, hacía mucho tiempo que se encontraba perdido, tan perdido como ella…

Bajo una sonrisa tímida esconde la fragilidad de su vida… le contaría tantas cosas…

Y es que hace mucho tiempo que vive en sus sueños, que tan solo escuchar el eco de sus susurros le provoca un temblor que no cesa…que sonríe cuando lo ve, y aunque esté lejos, lo siente a su lado…

Una mañana lo vio alejarse, y su corazón dio un vuelco…sintió un dolor intenso, ese dolor que se siente cuando se pierde a alguien que quieres, y ella lo quería…pero no sabía qué decirle para que se quedase con ella… La luna gritaba que lo perdía, ella estaba inmóvil, temblando al verle partir…por fin se decidió y gritó al viento su nombre…él al escucharlo sonrió, se giró, y con sólo mirarla a los ojos supo cuánto la quería…

- Por un minuto creí perderte…

- Por un minuto creí que no te importaba perderme…

Ella aún no le ha dicho todo lo que le debe, él le devolvió la vida cuando creía estar muerta, le sacó una sonrisa que parecía imposible de salir, pero es que ¿quién se puede resistir a su sonrisa? ¿Quién se puede resistir a su amor?

8 de noviembre de 2008

Princesa...


"Nunca, nunca es tarde para nacer de nuevo..."

Bueno, soy una chica de constantes cambios de humor...ahora estoy bien, ahora estoy mal....y ahora...ahora sigo estando mal...

Desfallezco a cada paso que doy...y es que voy muriendo a pasos agigantados, y eso me asusta, me estremece, me inquieta...no sé si pensar si lo que estoy haciendo es bueno o es malo, si está bien o estoy eligiendo un camino equivocado...no lo sé...

El porqué estoy mal…quién sabe, yo desde luego no lo sé…será que no son buenos tiempos para las chicas soñadoras como yo…será que en todo lo que me rodea no encuentro nada que me haga sonreír y plantarle cara a la vida…

Miro hacia atrás, recuerdo tiempos mejores...no veo nada que me haga seguir adelante, por más que busco, no encuentro nada en mi que merezca la pena... ¿me estoy equivocando? No, creo que no...Yo no soy como todos ven...no soy buena escritora, ni tampoco buena amiga...yo no soy nada...

Y es que quizá haya llegado la hora de arrodillarme de nuevo, de dejar de ser quién soy para empezar a ser quién quieren que sea...

7 de noviembre de 2008

Memorias de una princesa...



Hace tiempo que dejó de soñar, que dejó de creer en que su vida mereciese la pena...
Incluso dejó de escribir....algo que siempre había amado, un buen día dejó de hacerlo...
Y ahora ya no sabe si escribir es bueno o es malo...depende del día lo ve como una salida, como un desahogo...otros en cambio escribir es una prisión, una cárcel...
Ya no comprende porque su pasión se desvanece y su ilusión cada vez resulta más escasa...
Hay gente que le dice que ella vale, que le gusta ayudar a la gente...pero no, ella no opina como ellos...se dice a si misma y los que la rodean que si alguna vez tuviesen que convivir con ella se acabarían marchando de su lado...porque, para no perder a los suyos, se aleja...tiene miedo, muchísimo miedo, pero nunca la escucharás decírselo a nadie...es su secreto, el secreto de los valientes...aunque ella nunca fue valiente, nunca.
Ella no vale tanto como la gente cree, ella no ayuda a los demás, ella vive de los demás, porque sin ellos, no valdría nada, no sería nada...sin embargo se aleja de ellos siempre que tiene la ocasión...

La gente le pide que escriba cosas alegres, ¿alegres? Y ¿qué es la alegría para ella? Para ella su alegría es ver como, aún estando ella lejos, la gente que más quiere es feliz, sonríe y ve la vida con la positividad que a ella le gustaría tener…esa es su alegría y a la vez, el motivo de su tristeza…

Quiere que no la necesiten, que no la echen de menos cuando se va, quiere que aprendan a vivir sin ella, quizá porque esté pensando marcharse para no regresar… y antes de hacerlo quiere atar cabos sueltos…


Ella, ella hace tiempo que dejó de amar la vida, hace tiempo que se quedó sin reino…

6 de noviembre de 2008

Porque fue su vida en otra vida...


"Me duele hasta la sangre de lo mucho que te quiero..."

Se buscaba a sí misma, cuando de repente, lo encontró a él... se quedó callada como una estatua de sal, no era capaz de articular palabra...se miraron y se lo dijeron todo...no eran necesarias las palabras...
Sin timón ni timonel se dejó llevar por su marea...y, sin apenas darse cuenta llegó a quererlo con la misma intensidad que quería su propia vida...
Desnudó su alma, su vida, lo desnudó todo ante sus ojos, mostrándole todo aquello que deseaba compartir con él...no le importaba nada más...
Ahora se esconde ante falsas apariencias...para que nadie la vea llorando a solas...
En sus ojos destilaba una llamada urgente pidiendo a gritos "quiéreme"...pero nadie escuchaba su llamada...
Trataba de encontrar el nirvana, ese estado de alegría, esas ansias de vivir, ese lugar donde el dolor es intangible, donde solo existen las sonrisas y la felicidad...esa felicidad en la que ella nunca creyó hasta que supo lo que era al rozar sus labios con los de aquel joven con el que siempre había soñado...pensó que era un reflejo, tal vez lo era, pero ella era feliz así, tan solo disfrutando por un instante de su compañía...
Entonces partió hacia la playa, a hundir su vida entre las olas del mar...





Yo te lo cuento, tú no me crees...


Ella no sabía que realmente no tenía que escuchar sus palabras, ni ver sus gestos…

Ella tenía que escuchar lo que no le decía, aquello que callaba por miedo, aquello que sentía en su interior hacia ella, aquello que ella no sabría a menos que parase un momento y se limitara a interpretar el silencio, su silencio…

Porque hay veces que una mirada, un silencio, una falta de señales, puede significar muchísimo más que una palabra…pero eso ella no lo sabía…

Ella quería saber qué le decían sus ojos, quería que él hablase sin tapujos de lo que sentía…pero no se daba cuenta de que en realidad, eran iguales en ese aspecto…que se construían una coraza para no sufrir, que temían la felicidad, sin darse cuenta de que a ambos les unía el mismo fin, esa felicidad conjunta que muy pronto llegaría….

Pero tenían miedo…estaban separado, pero unidos por un mismo sueño…

“Me he dado cuenta que he tenido tanto miedo de las cosas malas, que me he perdido las buenas…”

5 de noviembre de 2008

Sin palabras...


"Y si quieres las estrellas, vuelco el cielo..."

"¿Alguna vez has cumplido un sueño, has hecho realidad aquello que tanto deseabas por muy imposible que pareciera? ¿O cuando más cerca estabas de llegar, lo has rozado con los dedos y lo has perdido en el último instante? ¿Has reído sin poder parar o has llorado hasta quedarte sin lágrimas? Tantos sentimientos, tantas historias, tantos sueños, tantas esperanzas… Quizá te has enamorado a primera vista, quizás te has quedado prendado de alguien tras conocerle o quizá has amado en secreto y nunca te atreviste a revelar tus verdaderos sentimientos. Sabrás lo que se siente al dar un beso, recibir un abrazo o entregar tu corazón y ser correspondido. Y probablemente sabrás también cómo el más bello de los sueños puede convertirse en la peor pesadilla, cómo se puede perder aquello que más quieres y sentir esa tristeza, esa soledad… ese hueco tan profundo que crees que nunca se podrá llenar… ¿Y alguna vez conseguiste escapar de ese vacío? ¿Encontraste a esa persona que mereciera la pena, abriste la puerta y la dejaste pasar? Si alguna vez, en tu interior, sentiste algo parecido… entonces, simplemente, sabrás lo que es estar vivo…"

Hoy no es un buen día para escribir, no me salen las palabras...

3 de noviembre de 2008

Cierra los ojos, dime ¿qué ves?


"Si algún día te dicen que me fui muy lejos, no los creas..."

Ella estaba nerviosa, lo iba a ver, iba a tenerlo enfrente después de tanto tiempo soñando con ese momento…

Y ahí estaba él, tan guapo como siempre, con una amplia sonrisa mirándola en la lejanía…sus miradas se cruzaron, “es ella” pensó, y se acercó tímidamente para saludarla…

Y tan solo unos minutos más tarde se vieron allí, en una playa alejada de la ciudad, del mundo corriente…era su playa…brindaron y tomaron unas cuantas copas de cava bajo el influjo de la luna y la suave brisa del mar…

Fueron a su casa, y una vez allí, se dejaron llevar por la pasión…no había nadie que quisiera como ella le quería a él en aquel momento…aún así, ella tenía miedo…miedo a que solo fuese eso, una noche…ella quería más que eso, quería pasar su vida junto a él, envejecer con él, vivir con él…

Para él no era el rollo de una noche loca, era mucho más…había sentido algo nada más verla que lo atrajo, lo sedujo, lo enamoró…

Te quiero, susurró él en su oído mientras fundía su cuerpo con el suyo…

En su cara se dibujó una sonrisa, y entonces no dudó, ya no tenía miedo, estaba segura, se sentía protegida, lo tenía entre sus brazos…

Acurrucados al borde de su cama vieron pasar sin prisa todas las horas del reloj…

- ¿Me seguirás queriendo mañana?

- Te querré hoy, mañana y siempre

Y durmieron juntos hasta que llegó el amanecer, sabiendo que, pese a que solo fuese una noche, a partir de ese momento estarían juntos para siempre…

Fue tan efímero...


"¿Alguna vez te han comido el corazón a mordiscos?"

Camino solitaria por el sendero de tu vida, vago sin rumbo por las calderas de tu olvido…

Me gustaría no tener que olvidarte, no tener que quererte…pero no puedo evitarlo…y sin embargo tú ya te has ido, ya me has olvidado…ya has rehecho tu vida…convirtiendo en cenizas todo aquello que un día construimos juntos…

Ni siquiera tengo fuerzas para expresar lo que siento…mi dolor se hace cada vez más grande, más intenso…

No te olvidaré, aunque lo desee con todas mis fuerzas…porque hay cosas que no se olvidan…

Eres algo que nunca tendré…porque hemos sido víctimas de nuestros propios juegos…porque no hemos hecho nada por nosotros…porque todo lo que hicimos, lo hicimos por los demás…

Pero no estamos tan mal ¿no? También podríamos ser enemigos…

Ahora estoy en un momento de incertidumbre, ahora no sé quién soy, no sé nada…y me cansé de ver este rostro en el espejo…

Aquí estamos los dos, bailando juntos la danza del adiós…

Y yo me encuentro aquí, en mis sueños…chocando contigo…

No doy un sólo paso que no me conduzca al abismo...

2 de noviembre de 2008

La lluvia cae despacio sobre el cristal...


“Ahora que te encuentro, veo que aún arde la llama que encendiste. Nunca, nunca es tarde para nacer de nuevo, para amarte...”

“Debo decirte algo, mirarte a los ojos y tal vez recordarte que antes de rendirnos, fuimos eternos…”

Desde pequeña soñaba con ser princesa, una princesa a la que le encantaba cantar y la música…mientras, él quería ser un gran compositor y músico…juntos tocaban y cantaban canciones de amor…Pasó el tiempo, y cuando los dos crecieron esas canciones se convirtieron en besos, besos de amor entre la princesa y su músico…

Su historia de amor comenzó en su infancia, que ambos recuerdan con una sonrisa, al verse tan niños y queriéndose tanto como se querían…y lo más grande de todo, ese sentimiento aún perdura en sus corazones…

Ella se llamaba Irene, él, Luis…y juntos hicieron de un pequeño sueño de amor infantil, una realidad preciosa…

Vivían en la misma finca de pisos de un apartado pueblecito a las afueras de Valencia…muy cerca de la playa y el muelle, donde les encantaba ir a pasear descalzos mirando al mar…

Desde pequeños jugaban y reían juntos, iban al mismo colegio y a la misma clase…estaban destinados a estar siempre el uno al lado del otro…y así fue, con el tiempo, ese amor infantil se hizo más y más grande, y se enamoraron perdidamente el uno del otro…

Vivieron una historia de amor intensa, desmesurada…se querían sin descanso, se lo daban todo…

Todo iba viento en popa…hasta que una fría tarde de invierno algo deshizo esa felicidad transformándola en dolor y llanto…

Irene cayó enferma, los médicos le habían dicho que le quedaban pocos meses de vida… a menos que se encontrase un donante de médula…

- Dime que me quieres….Espera, no digas nada…Te quiero

- Entonces lucharemos, y podrás, podremos, juntos

- Dime que todo va a ir bien

- Tranquila princesa, todo irá bien

Luis buscó desesperadamente alguien que les ayudara…las semanas fueron pasando y el miedo se hacía cada vez mayor…el tiempo se agotaba…

Él estaba sentado a su lado, disimuladamente y como si de un juego se tratase acercó su mano a la suya y la cogió con dulzura…”todo irá bien” susurró en su oído…

El nerviosismo se palpaba en el ambiente, tenía miedo de lo que pudiese pasar, pero tenerle a su lado la tranquilizaba…

La lluvia empapaba sus cuerpos desnudos…se dieron todo lo que tenían el uno al otro sin importarles el mañana…sabían que el tiempo se estaba agotando…

La noche era fría, durmieron abrazados en aquel pequeño hostal de carretera…

Sabían que su historia estaba llegando a su fin, pero querían vivir intensamente lo que quedaba de ella…

Aquella noche fue extraña…Irene estaba muy débil, las palabras no le salían, le faltaba el aliento…

- Hazme creer, aunque mientas, que esta noche no es tan rara, que no es tan triste…Provócame una sonrisa- Susurró con un último esfuerzo

- ¿Sabes? Anoche soñé contigo, estábamos en nuestra playa, tumbados en la arena, cerca del muelle, comiéndonos a besos, y el tiempo estaba detenido, sólo existíamos nosotros…y todo era perfecto…

Ella sonrió amargamente, y mirándole fijamente a los ojos habló con un último aliento:

- ¿Por qué yo?

- Porque tú eres diferente, eres mi princesa

Irene volvió a sonreír, su mano estaba entrelazada con la mano de Luís, ambos sonreían y lloraban, sabían que el tiempo se había acabado…

- Te quiero princesa, te querré siempre

- ¿Sabes? Me encanta que me digas que me quieres

- Te lo diré todos los días, a todas horas, te quiero, te quiero…

Entonces Irene cerró sus ojos, para no abrirlos nunca más…sus manos dejaron de apretarse…El rostro de Luis se llenó de lágrimas…

Cuatro años han pasado ya desde aquella noche, y aún hoy, Luis va a visitar a Irene y le dice que la quiere todos los días, tal y como le prometió…”Te echaré tanto de menos, cerraré fuerte los ojos hasta verte, sólo tengo que esperar” susurró llorando. Siempre te querré.


1 de noviembre de 2008

Amor a primera vista...



El abuelo

Una tarde de primavera me desperté en brazos de un hombre de pelo blanco y bigote; él me dijo, que había que ir a un sitio donde los niños y niñas pudieran jugar y divertirse, porque todo el mundo tiene derecho a pasarlo bien.

Esas palabras se me metieron en el corazón, un hombre tan dulce y tan bueno me había dicho las palabras más dulces del mundo; desde ese día comprendí que ese hombre de pelo blanco y bigote, era mi abuelo. Aquel fue el día más feliz de mi vida; me fui con mi abuelo al parque que había debajo de mi casa a jugar con él, y a divertirme. Cuando se hizo de noche me fui a mi casa y le dije a mi madre que ese había sido un día muy especial, porque había conocido a una persona tierna y dulce, mi abuelo.

Y desde ese día voy a jugar con mi abuelo todos los días, y lo respeto, porque me parece que todas las personas, aunque seamos viejos o jóvenes merecemos ser respetadas.

1ª Premio en el Concurso de redacciones C.P. Blasco Ibáñez, año 1998
, por Verónica Martínez Font

Esa fue la primera vez que escribí algo, y mira por donde, gané el primer premio de mi clase… mi madre siempre me dijo que apuntaba maneras, que era una niña muy solitaria, pero que cuando estaba con la gente me encantaba hacer reír haciendo el tonto o cantando canciones encima de la mesa…y también dice que siempre me gustó escribir, que observaba mucho las cosas y más tarde escribía lo que había visto de una forma muy peculiar…dice que le encanta como escribo, amor de madre, supongo, pero que soy muy tétrica y que le gustaría que escribiese cosas más alegres…

Lo de escribir y yo fue amor a primera vista, no lo había hecho nunca, pero cuando probé a hacerlo, me encantó…fue como un flechazo, no podía dejar de escribir un solo momento, tenía que relatar lo que veía, contar lo que sentía…así, poco a poco, nos hicimos inseparables…y aunque alguna que otra vez la inspiración me abandone, siempre me acompaña allá donde voy mi fiel cuaderno amarillo y un bolígrafo…

Tanto es así que ahora mis textos son mis grandes aliados…me acompañan en mi soledad, aunque a veces solamente sea yo leyendo lo que escribo en voz alta, me siento acompañada por mis letras, por cada coma, cada palabra, cada párrafo…cada sueño…

Y cerró los ojos, hasta volverse humo...



"Dicen que las princesas son tan sensibles que notan la rotación de la tierra, que si están lejos de su reino se enferman, que hasta se pueden morir de tristeza..."

"Tú no princesa, tú no. Tú eres distinta. No eres como las demás chicas del barrio...Tú no, princesa. Tú no. Tú eres la rosa que fue a nacer entre cardos como revancha a un arrabal despiadado en donde el día se ocupa de echar por tierra toda esperanza..."

Aunque hoy sonría, en su interior sigue y seguirá siendo la chica solitaria y triste...porque es como es, no puede cambiar eso...

Este día es un día más, no tiene nada de especial para ella, nunca lo tuvo...

Trató de buscar su reino, pero no halló a nadie dispuesto a entregarle todo lo que ella daba, siempre salía perdiendo...entonces cerró los ojos hasta volverse humo...

Y ahora y siempre, será la princesa sin reino...